La Organización Mundial de la Salud (OMS) decretó el nivel máximo de alerta por la gripe causada por el virus AH1N1I y advirtió que “circulará por todo el mundo durante un año o dos”, aunque la calificó de “moderad”.
“El virus no puede ser detenido”, subrayó la directora de la OMS Margaret Chan. “Decidí elevar la alerta pandémica de la fase 5 a la 6”, explicó en una conferencia de prensa en la sede de la organización en Ginebra.
“Tenemos pruebas indiscutibles de que estamos en los primeros días de una pandemia global del virus tipo A subtipo H1N1”, subrayó, pidiendo una vez más a los países que no cierren sus fronteras ni restrinjan los movimientos de personas ni bienes. Para Margaret Chan, a pesar de que el virus AH1N1 sea totalmente nuevo y se transmita entre humanos, la pandemia aún es “moderada”.
Poco antes Chan había informado personalmente sobre la situación a los embajadores de los Estados miembros de la organización. La Directora General de la OMS llamó a la vigilancia, pero se mostró tranquilizadora.
La declaración del estado de pandemia “es también una advertencia a la comunidad internacional. Es el momento para que el mundo entero se reagrupe en nombre de la solidaridad mundial para estar seguros de que ningún país será abandonado”, declaró Chan a la prensa.
La OMS mantuvo desde el 29 de abril el nivel de alerta 5, lo que significa una pandemia inminente. Los casos de infecciones por el virus AH1N1 ascienden ya a 28 774 en 74 países del mundo y 144 son las personas fallecidas por esta enfermedad, según el último balance de la OMS, comunicado anoche.
La situación en Australia fue la que forzó la decisión de pasar la alerta al nivel 6. Fukuda reconoció el martes “una transmisión local” en el estado de Victoria.
Australia es el quinto país más afectado en el mundo por el virus, con 1 263 casos. Las autoridades indicaron este jueves que cuatro personas contagiadas fueron ingresadas en terapia intensiva. Sin embargo, no es el único. En Chile, la cantidad de contagios se triplicó en dos días, alcanzando ya a 1 694 personas.
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, invitó a la comunidad internacional a guardar la calma y mostrar solidaridad frente a la pandemia.
“La activación de la alerta máxima no supone en sí una causa de alarma, aunque no debemos bajar la guardia. La mejor respuesta es una demostración de solidaridad. La ONU trabajará con los Gobiernos y la OMS para garantizar que la respuesta sea coordinada y eficaz”, dijo Ban.
Para que una enfermedad se denomine pandemia, debe ser muy contagiosa y de fácil traslado de un sector geográfico a otro.
“El virus no puede ser detenido”, subrayó la directora de la OMS Margaret Chan. “Decidí elevar la alerta pandémica de la fase 5 a la 6”, explicó en una conferencia de prensa en la sede de la organización en Ginebra.
“Tenemos pruebas indiscutibles de que estamos en los primeros días de una pandemia global del virus tipo A subtipo H1N1”, subrayó, pidiendo una vez más a los países que no cierren sus fronteras ni restrinjan los movimientos de personas ni bienes. Para Margaret Chan, a pesar de que el virus AH1N1 sea totalmente nuevo y se transmita entre humanos, la pandemia aún es “moderada”.
Poco antes Chan había informado personalmente sobre la situación a los embajadores de los Estados miembros de la organización. La Directora General de la OMS llamó a la vigilancia, pero se mostró tranquilizadora.
La declaración del estado de pandemia “es también una advertencia a la comunidad internacional. Es el momento para que el mundo entero se reagrupe en nombre de la solidaridad mundial para estar seguros de que ningún país será abandonado”, declaró Chan a la prensa.
La OMS mantuvo desde el 29 de abril el nivel de alerta 5, lo que significa una pandemia inminente. Los casos de infecciones por el virus AH1N1 ascienden ya a 28 774 en 74 países del mundo y 144 son las personas fallecidas por esta enfermedad, según el último balance de la OMS, comunicado anoche.
La situación en Australia fue la que forzó la decisión de pasar la alerta al nivel 6. Fukuda reconoció el martes “una transmisión local” en el estado de Victoria.
Australia es el quinto país más afectado en el mundo por el virus, con 1 263 casos. Las autoridades indicaron este jueves que cuatro personas contagiadas fueron ingresadas en terapia intensiva. Sin embargo, no es el único. En Chile, la cantidad de contagios se triplicó en dos días, alcanzando ya a 1 694 personas.
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, invitó a la comunidad internacional a guardar la calma y mostrar solidaridad frente a la pandemia.
“La activación de la alerta máxima no supone en sí una causa de alarma, aunque no debemos bajar la guardia. La mejor respuesta es una demostración de solidaridad. La ONU trabajará con los Gobiernos y la OMS para garantizar que la respuesta sea coordinada y eficaz”, dijo Ban.
Para que una enfermedad se denomine pandemia, debe ser muy contagiosa y de fácil traslado de un sector geográfico a otro.
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